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La caravana de migrantes que partió el pasado sábado desde San Pedro Sula, en Honduras, logró cruzar la frontera y llegó a Guatemala; mientras el presidente de EE.UU. amenazó con cortar la ayuda al Gobierno hondureño si este no frena el avance de los migrantes.
“Estados Unidos informó con firmeza al presidente de Honduras que si la gran caravana de personas que se dirigen a Estados Unidos no es frenada y llevada de vuelta a Honduras, no habrá más dinero ni ayuda para Honduras, con efecto inmediato”, escribió Trump en Twitter.
Para llegar hasta territorio estadounidense, la caravana que reúne a unos 2 mil inmigrantes debe seguir una ruta de unos 2.000 km plagada de obstáculos y peligros. Antes de ingresar a Guatemala, policías les cerraron el paso, pero horas después lograron llegar a un refugio en poblado Esquipulas.
Los inmigrantes, entre ellos cientos de menores de edad, partieron ayer temprano hacia Ciudad de Guatemala y luego seguirán hacia México, donde las autoridades ya reforzaron la seguridad fronteriza.
La solidaridad de guatemaltecos alienta a los andantes, a quienes regalan agua o alimentos. La fundación Corazones Bondadosos preparó una olla de frijol y cocieron una gran cantidad de huevos, registró el diario local Prensa Libre.
“Esto nos consterna, es indignante lo que hacen los gobernantes, robar y empobrecer a sus pueblos y cómo esta gente tiene que salir y dejarlo todo y viajar con sus niños”, dijo la activista Norma Lemus.
El Gobierno hondureño, implicado en casos de corrupción, recibe $ 70 millones anuales de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional y para el presente año fiscal se fijó una ayuda de $ 115 millones.
Más de 1 millón de hondureños reside en EE.UU. En 2017 inyectaron $ 4.000 millones en remesas a la economía de su país, equivalentes al 20% del producto bruto interno. (I)
FUENTE: EL UNIVERSO
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