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Los líderes internacionales acordaron en esa resolución, firmada por 193 países en la cumbre sobre refugiados y migrantes celebrada en Nueva York el pasado septiembre, negociar una serie de medidas para garantizar flujos más «seguros, ordenados y legales».
La iniciativa, impulsada por México y Suiza, fue respaldada por el entonces mandatario Barack Obama y ha sido acogida por la ONU, como uno de los mayores retos para el año 2018.
La ONU buscará avanzar en el Pacto Mundial para una Migración, en una cumbre en Puerto Vallarta, México, que inicia hoy con el serio revés por el abandono del convenio de EE.UU. Hoy y mañana se desarrollará un encuentro, que supone el primer episodio de la segunda fase de reuniones.
Entre los acuerdos de la primera fase, destacó el consenso de los Estados miembros en que «los Derechos Humanos deben aplicar a todos los migrantes, sin tener en cuenta su estatus, incluidos los migrantes indocumentados y aquellos en situación vulnerable», destacó la ONU en un documento.
La reunión marca el comienzo de la fase II del proceso, cuyo final debería darse en septiembre del 2018 con la adaptación del Pacto Mundial sobre Migración. (I)
FUENTE: EL TIEMPO
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