Las barberías se han convertido en un negocio que ha registrado un crecimiento en Loja con la apertura de nuevos establecimientos. Aquí quienes atienden son hombres que brindan sus servicios solamente a personas de su mismo género, a través de cortes de cabello, rasurada, retoque y diseño de barba y bigote, y también asesoría de imagen.
Rafael Romero, un joven barbero lojano que posee su propio local, aclara que una barbería no es lo mismo que una peluquería o un centro de belleza convencional donde se brindan servicios a hombres y mujeres. Dice que las barberías únicamente son para varones, y ahí se encargan de mejorar su estética.
En su caso, los servicios que ofrece van desde diseños de barba, cortes de cabello, asesoramiento… “Tenemos haciendo ya años esto, no somos improvisados”, manifiesta Romero.
Este barbero admite que en Loja últimamente se han abierto varios establecimientos donde se ofrecen los servicios de barbería y quienes están tras de ellos son jóvenes que tienen desde 19 años de edad y que han aprendido el oficio. “La mayoría entre amigos abren locales y para qué, hacen buenos trabajos”, señala.
Romero dice que existen casos de barberos que aprenden el oficio mediante la práctica constante, pero también hay centros de belleza donde se forman a nuevos profesionales. sabe lo aprendió trabajando en otras barberías, aunque explica que está preparándose en la Junta Provincial de Defensa del Artesano para obtener el título de maestro en barbería.
Un oficio con tradición
El oficio de barbero, en otros casos, es una tradición familiar. Esto ocurre en los hermanos Luis y Fernando Jaramillo, de 32 y 21 años de edad respectivamente. Su abuelo y padre se dedicaron a este trabajo y les transmitieron los conocimientos. “Se podría decir que nosotros somos la tercera generación ya de barberos”, explica Luis, quien inició en este mundo cuando tenía 10 años de edad.
Asevera que un barbero es quien atiende exclusivamente a caballeros con cortes de cabello y afeitado, incorporando últimamente aspectos como la asesoría de imagen o estilismo.
Señala que la barbería de antes se centraba en cortes de cabello y afeitado, descartando la asesoría.
Sobre el incremento de nuevas barberías en Loja, Luis es crítico porque considera que muchos de estos locales son atendidos por personas que no tienen la experiencia suficiente y desconocen aspectos del oficio, como su historia por ejemplo. Esto hace que el trabajo de otros se vea desvalorado, aduce.
Más allá de estos aspectos, Luis Jaramillo sostiene que la barbería es un oficio que goza de demanda, es rentable y también es un trabajo que tiene mucho futuro, porque los hombres actualmente procuran verse siempre bien. Agrega que en el caso de él y su hermano, siempre asisten a seminarios y otros eventos para capacitarse y así ofrecer un mejor servicio a sus clientes.
Para el abogado lojano Lenín Padilla, quien es cliente de la barbería de los hermanos Jaramillo desde hace tres años, los hombres siempre buscan verse bien, naciendo de ahí la necesidad de acudir donde expertos en la rama. (JGN)
FUENTE: LA HORA
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