El problema para los docentes que ganaron el concurso de merecimientos y oposición en la Universidad Nacional de Loja (UNL), convocado por la Comisión Interventora y de Fortalecimiento Institucional (CIFI), continúa sin solución. Ángel Polivio Chalán es uno de los 222 catedráticos ganadores. Él, al momento, se encuentra desempleado.
“Participé en todas las fases y el reglamento del concurso, aprobado por el Consejo de Educación Superior (CES), al final con la medida urgente 110 y 110 A nos declararon ganadores absolutos del concurso y luego convocaron la posesión para el 26 de septiembre”, comenta y agrega que tuvo que renunciar a todos los trabajos anteriores para posesionarse, pero no se cumplió.
Ángel Polivio Chalán, frente a ello, pide a las autoridades acatar la primera sentencia del 5 de septiembre en la que “se reconoce el planteamiento y la vulneración de nuestros derechos del grupo 1, en la segunda sentencia del grupo dos también reconocen y ratifican el pronunciamiento de los jueces, en la tercera dice que han vulnerado y por lo tanto no se procede a dar el nombramiento al grupo 3 y en el grupo 4 también ratifican que sí estamos con nuestros derechos vulnerados”, afirma el docente.
Ingreso a la universidad
Ángel Polivio Chalán ingresa en condición de contratado el primero de marzo de 2015 para impartir la cátedra de quichua y filosofía.
Luego de su participación en el concurso, lo declararon ganador y fue posesionado el 26 de septiembre, pero “el 27 me encontré con la ingrata noticia de que estamos fuera”. Continuó trabajando en octubre y noviembre, pero “no me reconocieron, y en ese último mes las autoridades me comunicaron que no debía seguir impartiendo clases sin un documento legal. Iban a regular el problema y que me van a llamar… hasta ahora no se arreglan las cosas”.
Tras renunciar a su contrato, comenta, en compañía de algunos docentes plantearon el recurso de acción y protección como derecho constitucional. “La resolución de la jueza de la Niñez y la Familia del 27 de diciembre salió favorable a nosotros porque vulneraron nuestros derechos y daba 30 días de plazo para nuestra posesión”, señala y agrega que no se cumplió y hubo una apelación presentada por las autoridades de la UNL, “porque no era viable y el proceso duró hasta abril, hasta que se dio la sentencia definitiva en segunda instancia frente a la apelación y ratificación, dieron un plazo de 15 días para que nos reintegren a la universidad, pero no se cumple”, dice
Son más de cinco sentencias dictadas por los jueces, explica el docente y acota que “ahora estamos esperando que nos integren nada más”.
“Escuché a la vicerrectora, Martha Reyes, decir que ellos están acatando lo que dicen los jueces porque hay sentencias contradictorias, unos que niegan y otros que reconocen, pero que a ellos como autoridades deben acatar la primera sentencia”, precisa Ángel Polivio Chalán, al tiempo solicita a las autoridades de la UNL solucionen el problema que lleva ya cerca de nueve meses.
“Estoy esperando que se cumpla con la ley, si es que logro ingresar aportaré al máximo, la propuesta es trabajar para que la UNL vaya a la categoría A, en el proceso de re categorización”, recalca. (XAPM)
FUENTE: LA HORA
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