Lula quedó totalmente aislado en la celda especial de 15 metros cuadrados que le fue improvisada en la sede de la Superintendencia de la Policía Federal en la sureña ciudad de Curitiba y, fuera de los guardias, su único contacto fue con Cristiano Zanin, uno de sus abogados, según un comunicado del Partido de los Trabajadores, PT.
Su celda está totalmente aislada de la de otros condenados por el escándalo de corrupción en la petrolera Petrobras, incluyendo algunos que lo incriminaron, como el empresario Leo Pinheiro y su exministro de Hacienda Antonio Palocci.
«Él durmió tranquilo y no fue maltratado por los agentes del lugar. Permanece sereno y tranquilo», según la nota del partido que ayudó a fundar en 1980 y que ha convocado manifestaciones en todo Brasil para exigir la liberación del líder en todos los sondeos de intención de voto para las elecciones presidenciales de octubre.
De acuerdo con el comunicado, Zanin lo acompañó durante un largo período en la celda antes de tener que abandonar la edificación, a la que tenía previsto regresar en la tarde de ayer.
Pese a los líderes políticos que han comenzado a concentrarse en Curitiba y a los que anuncian viajes para los próximos días, las visitas en los primeros días estarán restringidas a los abogados.
La celda, que cuenta con una cama de soltero, una mesa y un baño privado, fue equipada ayer con un televisor, autorizado por la Justicia y que el expresidente pidió para poder ver el partido ayer de su equipo de corazón, el Corinthians, que se medía por la final del Campeonato Paulista con su histórico adversario, Palmeiras.
Reacciones
El líder de la izquierda radical francesa, Jean-Luc Mélenchon, denunció ayer que en Brasil se produjo un «golpe de Estado judicial» contra el expresidente Lula da Silva.
«Lula nunca ha sido corrupto», indicó en una entrevista en la emisora ‘Europe 1’.
Mélenchon acusó a la derecha brasileña de querer hacer desaparecer la amenaza electoral que representa para ella el Partido de los Trabajadores, PT, liderado por Lula.
Por su parte, El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó ayer que Brasil «sufre el peor golpe contra su democracia» por la detrención del expresidente Lula.
«Elección sin Lula, es fraude. Cárcel sin juicio justo y sin pruebas, es delito. Brasil sufre el peor golpe contra su democracia», escribió Morales en Twitter.
Agregó que «movilizados los pueblos de Latinoamérica denuncian el más grave atentado de injusticia perpetrado por derecha pro imperialista ante los ojos del mundo».
“Lula libre”
Menos de doscientos metros separan la celda donde está recluido Lula da Silva del campamento que levantaron ayer sus simpatizantes con la intención de que permanezca en pie hasta que le vean en libertad.
«Lula libre», así bautizó la militancia reunida en un cruce del barrio de Santa Cândida, en la zona norte de la ciudad de Curitiba, sur, el improvisado cuartel que comenzó a tomar forma con la distribución de tareas y la instalación de las primeras carpas.
El objetivo, resistir hasta conquistar la libertad de su líder «en este país todo funciona con presión», afirma Roberto Baggio, coordinador del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra, en el estado de Paraná. (I)
FUENTE: EL TIEMPO
Comments