El Ministerio de Sanidad informó que ocho de los más de 120 heridos que están distribuidos por varios hospitales del país continúan en cuidados intensivos y que cuatro de ellos están en estado grave, mientras que siete personas recibieron el alta.
El titular del departamento, Imad Ahmed, que visitó a las víctimas, reveló que, entre los fallecidos en el atentado, figuran un conductor de ambulancia y un enfermero, que estaban rezando en la mezquita cuando fue atacada el viernes al mediodía.
Mientras, el asalto al templo de Al Rauda, ubicado en la localidad de Bear al Abd, al oeste de la ciudad de Al Arish, sigue sin ser reivindicado por ninguna de las organizaciones radicales que se ha hecho fuerte en el noreste del Sinaí en los pasados años.
El grupo terrorista Wilayat Sina, la rama egipcia del Estado Islámico, EI, difundió su primer comunicado tras la masacre sin hacer ninguna referencia al ataque, que, según expertos, lleva su sello.
El ataque, que todavía no ha sido reivindicado, se produjo en el inicio del sermón del viernes, día sagrado para los musulmanes, cuando los fieles se vieron sorprendidos. (I)
FUENTE: EL TIEMPO
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