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“Ecuador no solo ensamblará autos eléctricos, sino que los vamos a fabricar. Para eso hemos diseñado el concepto, la tecnología y estamos trabajando sobre patentes, entre otros detalles”, indicó Raúl Molina presidente de Red Tech.
Héctor Rodríguez, gerente de Yachay, se refirió a este contrato como “el proyecto de inversión privada más importante de los últimos años”.
“Red Tech en Yachay incluye la inversión de 3.000 millones de dólares, el tres por ciento de nuestro PIB”, afirmó y acotó que la fábrica generará 17.000 plazas de empleo directo e indirecto, y su producción máxima está prevista para el quinto año de ejecución.
Señaló que la construcción de la planta durará cerca de tres años y ocupará 400 hectáreas del parque industrial de la Ciudad del Conocimiento Yachay, ubicada en el cantón Urcuquí, provincia de Imbabura.
A decir de Rodríguez, esto contribuye al desarrollo de matriz productiva en el país.
Proveedores
“El proyecto también incluye la creación de una red de proveedores ecuatorianos a nivel nacional, que abastecerá las necesidades de producción de la mega fábrica y generará el apoyo directo para el fortalecimiento de las pequeñas y medianas industrias del país”, aseveró.
Por su parte René Ramírez, secretario de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación, Senescyt, recordó las críticas de la oposición al Gobierno ante la construcción de la Ciudad del Conocimiento. Indicó que ahora en este lugar se fabricarán los primeros vehículos ecuatorianos, que además serán eléctricos.
“Aquí hablamos de una empresa que busca desarrollar tecnología made in Ecuador, no solo para el mercado nacional, sino para la exportación”, precisó.
Además, Red Tech y la Senescyt establecieron un convenio para que 3.000 estudiantes de Yachay desarrollen temas de tesis y trabajos de graduación cuando la fábrica entre en producción.
Justin Perry, gerente general de Red Tech, dijo que uno de los factores decisivos para que la empresa se determine a invertir en el país fue los incentivos que el Estado ecuatoriano entrega a las empresas privadas tanto nacionales como extranjeras. (VDS-RET) (I)
FUENTE: EL TIEMPO
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