El Paso Lateral de Loja tiene dos caras, pues a pesar de ser una obra nueva, de condiciones únicas en cuanto a dimensión y materiales, este proyecto presenta problemas relevantes en tramos específicos que no han podido ser solucionados. Esto incluye pérdidas de vía y movimientos de masa.
Natalia Peña indica que estos problemas pasan en cualquier parte del mundo, pues independientemente de los aspectos técnicos de la construcción, frente a condiciones naturales “no hay nada que hacer”, asegura, señalando que estos inconvenientes están ligados a las condiciones climáticas y al comportamiento de los taludes.
Indica que en el caso de una de las afectaciones fue saneada, está delimitado el perímetro y se realizarán limpiezas hasta que el talud se estabilice y por precaución se ha limitado el tránsito por el sector.
Indica que este tipo de casos no son imputables al contratista, porque sobrepasan los diseños y los límites con los que se construye todo tipo de obra. Explica que han venido monitoreando durante varios meses las fallas, se ha realizado procesos de muestreo, se han corregido conexiones de agua clandestinas con la finalidad de evitar la presencia de agua subterránea para tratar de controlar el problema.
Por eso lo que se espera es la realización de estudios que permitan dar un diseño definitivo a los puntos críticos de falla que tiene el Paso Lateral, los cuales no son un problema exclusivo de este proyecto sino que se presentan en todas las carreteras de la provincia, en donde se los trata como corresponde, ayudando a quien transita a identificarlos con señalética vial. (CAB)
FUENTE: LA HORA
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