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Llegar a Loja en estas fechas para visitar a la Virgen del Cisne y rendirle pleitesía es una tradición de años, e incluso de décadas en muchos peregrinos azuayos.
Principalmente vienen de la ciudad de Cuenca y arriban a Loja en compañía de familiares.
La presencia en la ciudad de devotos azuayos es más evidente en estos días, víspera del 8 de septiembre, día de la fiesta de la ‘Churona”.
Enrique Tenemea, de 60 años de edad, arribó ayer a Loja en compañía de su esposa y cuatro hijos, para visitar a la Virgen del Cisne y agradecerle por los favores recibidos. Esta es una tradición que repite junto a su familia cada año. Su estadía en la urbe será hasta este viernes y participará junto a sus allegados en la procesión que se realizará luego de la misa campal en los exteriores de la Catedral.
Visitar a la Virgen del Cisne es para este ciudadano una tradición que data de hace décadas. Comenta que desde que era niño ya venía a Loja para homenajear a la imagen en septiembre.
Otro caso de devoción es el de Rafael Paredes, quien dirige un numeroso grupo de fieles de Cuenca que estuvo hasta ayer en Loja realizando actividades para festejar a la Virgen del Cisne. Este grupo lo conforman priostes que tienen a su cargo homenajear a la imagen el 4 y 5 de septiembre de todos los años. Señala que es rendir tributo a la Virgen del Cisne es un compromiso que como grupo de priostes lo continuarán realizando hasta cuando “ella mismo nos dé salud y vida”.
Paredes tiene 58 años de edad, y durante gran parte de su vida ha venido a la ciudad para visitar a la ‘Churona’. Recuerda que cuando era niño solía venir junto a sus abuelos.
Muchos de los peregrinos que llegan a Loja en estas fechas vienen para agradecerle a la Virgen del Cisne por milagros y favores concedidos. Gladys Maza, de 60 años de edad, dice que ha recibido varios milagros para su familia. Por ejemplo cita que una hija atravesaba una situación difícil en su hogar, y ante ello le elevó una plegaria a la ‘Churona’ para pedirle que intervenga en esta situación. La fe de esta madre de familia logró que vuelva la paz y la armonía al hogar de su hija. Gladys dice que continuará visitando a la Virgen del Cisne en los siguientes años. (JGN)
FUENTE: LA HORA
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