Antes y mientras se desarrollaban los problemas dentro del recinto, graves incidentes se registraban en la plaza donde se ubica el Congreso, cuando agentes de Gendarmería y de la Policía arrojaban gases lacrimógenos y balas de goma a los manifestantes, que presuntamente tiraban piedras y quemaron contenedores tras ser convocados por las principales organizaciones sindicales.
Representantes de bloques como Justicialista y el Frente Renovador, de orientación peronista, rechazaron el proyecto.
El presidente del Partido Justicialista, José Luis Gioja, acusó al oficialismo de «quitarle a los que menos tienen».
La discusión se centra en el cambio de fórmula para calcular los aumentos de haberes jubilatorios.
Mientras la actual ley de Movilidad Jubilatoria establece un ajuste semestral en base a una mezcla entre la recaudación de la Administración Nacional de la Seguridad Social y la variación salarial, el mecanismo que propone el Gobierno de Macri fija que será trimestral y se calculará entre la inflación y los aumentos de sueldos.
Los críticos señalan que la reforma -que busca aliviar el grave déficit fiscal- implicará un recorte de los incrementos que reciben actualmente las jubilaciones y pensiones. (I)
FUENTE: EL TIEMPO
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