Con la llegada de la Navidad es común observar pesebres gigantes en iglesias, instituciones o espacios públicos, sin embargo, en la vivienda de Beatriz Jaramillo Ortiz, ubicada en el centro de la ciudad, también se encuentra uno.
Beatriz (80 años) destina desde hace dos años una habitación completa de 3×4 metros para representar el nacimiento de Jesús en Belén.
Al ingresar al sitio, el sonido de las luces navideñas y del agua al caer en pozos y cascadas inspiran paz y armonía. Esta ingeniosa creación se divide en el nacimiento con los personajes de María, José y el Niño; muy cerca están los pastores con sus rebaños; y los reyes magos en camino a Belén.
En un pequeño descenso se instaló un río con tres lavanderas y una canoa cargada de frutas que simula la venta en el pueblo.
Este pesebre gigante se compone de alrededor de 1.500 figuras, entre grandes, medianas y pequeñas, además de un escenario adecuado con ríos y lagunas, elaborados con papel y tela por las hábiles manos de Beatriz, quien es modista de profesión.
Por la magnitud de la creación, esta permanece instalada durante todo el año y le da mantenimiento cada cierto tiempo hasta que llegue la época navideña. “Ya no le guardo, pero sí le voy adecuando y llenando con más detalles todos los años…”, manifestó.
Según comenta, en la Navidad del año anterior se celebró una eucaristía en su casa. “Invité como a unas 60 personas y resultó hermoso”, mencionó. (I)
FUENTE: EL UNIVERSO
Comments